La actitud es la fuerza más poderosa que poseemos, sin embargo a menudo la ignoramos. Hacemos todo lo posible por dejarla en un segundo lugar, mientras nos esforzamos por culpar a los demás de lo que nos pasa, quejándonos de todos los problemas que se nos vienen encima y sintiéndonos víctimas de las circunstancias.
La pregunta que tenemos que hacernos es: ¿qué actitud estamos adoptando ante la vida? Reflexionar sobre esta cuestión y saber si nos está beneficiando o no, nos permitirá ser mucho más conscientes de por qué poco o nada marcha tan bien como nos gustaría. Incluso, si abrimos bien los ojos, nos daremos cuenta de que las dificultades no son tan terribles como las estamos viendo.
Podemos escoger como afrontar las circunstancias, al menos sobre eso siempre tenemos control. La actitud es la fuerza más poderosa que tenemos, pues gracias a ella podemos cambiar lo que nos sucede o, al menos, el modo en el que le hacemos frente.
¿Aceptamos o rechazamos? ¿Nos quejamos o nos ponemos en marcha?
Imaginemos que tenemos una pareja que siempre se está quejando, de manera que su actitud cada vez nos gusta menos, vivimos amargados, es una buena persona pero ya no somos felices en nuestra relación; sin embargo, ahí estamos sin tomar ninguna decisión. Mientras, intentamos que nuestra pareja cambie, le echamos la culpa de lo mal que va la relación, que el vínculo está cada vez más roto.
Leyendo esto, desde nuestra perspectiva, sabríamos perfectamente qué hacer. Tenemos dos opciones: aceptar a nuestra pareja tal y como es, quererla y amarla sin desear que cambie. También podemos romper la relación y darle la oportunidad al otro de que también pueda ser feliz con otra persona.
Como podemos ver, la actitud es la fuerza más poderosa, pues nos permite salir de una situación que no nos gusta. Todo ello, tomando una decisión y cambiando nosotros, no intentando que el otro lo haga. Esto mismo puede aplicarse en otro tipo de circunstancias. cuando nos quedamos sin trabajo, cuando una enfermedad hace acto de presencia o cuando un familiar muere. Ante el panorama mundial que vivimos, nos acecha el miedo, la falta de trabajo, la salud etc, … y la fe … es una época sino las más difícil que hemos vivido los que pertenecemos a esta generación, nada fácil es transitar cada día, así que usa la fuerza que tenés.
La actitud es la fuerza más poderosa que impulsa los cambios, las tomas de decisión, los nuevos rumbos. Gracias a ella, podemos encontrar nuestra felicidad o mantenerla. Porque no olvidemos que la felicidad tenemos que encontrarla en nuestro interior, con independencia de que el exterior contribuya: unas veces lo hará y otras no.
Gracias al poder de nuestra actitud, podemos comprender que no hay límites y que no tenemos por qué sentirnos desbordados por las circunstancias. Por muy grave que pueda resultar una situación, como la pérdida de un trabajo o la pandemia terrible que vivimos., siempre terminaremos saliendo y superando este trance . Es la propia inercia vital.
Sin embargo, en ocasiones nuestras emociones ahogan este atisbo de esperanza, dramatizando en exceso lo que ocurre. No obstante, tarde o temprano, no nos quedará otra que aceptar la situación y seguir adelante.
¿Por qué no hacerlo desde un principio? ¿Por qué buscar sentirnos tan mal sin que sea necesario?
Es importante que confiemos en nosotros mismos y que no nos quedemos en nuestras zonas de confort: si lo hacemos se reducirán, en vez de ampliarse. Si nos quedamos en ellas veremos cómo se estrecha ese estado de confort, hasta que poco a poco deje de ser “de confort” y nos sintamos acorralados por las propias circunstancias.
No tenemos por qué tenerle miedo al cambio. Los cambios en principio son oportunidades, nuevos comienzos, nuevos rumbos. Dejaremos algo atrás, es cierto. Pero lo que está por venir también puede dejarnos algo nuevo si contamos con la paciencia y la inteligencia como para ponerlo a nuestro favor. Una ocasión para aprender, superarnos, madurar y darnos cuenta de que podemos con todos los problemas que se nos presenten.
No nos olvidemos de que la actitud es la fuerza más poderosa del cambio. Podemos tomar decisiones para salir de una situación que nos desagrada. Podemos aceptar aquello que no nos gusta, dejar de rechazarlo y seguir adelante. Muchas veces, el reflejo del futuro nos devuelve una imagen más complicada de lo que en realidad nos aguarda. Con la actitud elegimos algo tan sencillo y vital como la forma de posicionarnos ante esta imagen.
Un pequeño cambio de actitud puede marcar una gran diferencia. Puede convertir una situación difícil, en superable, y una circunstancia dolorosa en una oportunidad para fortalecerse.
Bienvenidos a una nueva Edición de Noobstyle, con una gran sorpresa un cambio de diseño mucho mas moderno y actualizado, seguimos con notas de calidad e inauguramos esta nueva etapa con una entrevista a una Artista del maquillaje Mabby Autino. espero disfruten esta nueva edición con nuevo formato, lo digital llego para quedarse.
Monica Brun
Dirección Editorial.